jueves, septiembre 04, 2008

Me dejo mecer por un fado de Amália Rodrigues que me trae a la memoria un no sé qué ya antiguo y, por olvidado, casi carente de perfiles, pero que a pesar de todo está ahí, aunque ya no recuerde dónde, ni cuándo, ni cómo me envolvió alguna vez y se me quedó en el baúl de los recuerdos que uno nunca supo que tenía porque sólo le preocupaba el mañana y correr para adelante a ninguna parte. Definitivamente, y es terrible darse cuenta a mi edad, hay cosas que son aunque uno no sepa a ciencia cierta por qué y como nacieron. Debe ser porque son ellas misma a pesar de nosotros, simples elementos vehiculares pero con pretensión de absolutismo y eternidad, y que tan sólo sabemos movernos en límites espaciales y temporales conocidos y amigos, que ya es el colmo de la propia limitación y finitud. Pero a lo que iba. Me dejo mecer inconsistente, porque la sensación es esa precisamente, la de deslizarme ingrávido de una orilla a otra, con una especie de vacío protector en mi entorno y un algo de “saudade”, que si suena bien, aún se percibe mejor, sintiendo, como se siente, entre pecho y espalda, detrás del esternón, y justo encima del estómago. Es una sensación entre triste, por desamparo, y plena, porque no hay nada más pleno y contundente que la sensación de distancia, de vacío, de soledad, de añoranza y hasta de miedo; incluso debe ser una especie de multisensación, como en los multicines, que con una entrada común hay un destino posible por decidir.
Respiro por la nariz y despacio, llenando plenamente mil pulmones y sus aledaños, y retengo dos segundos el aire. ¡Pufff...…! Expiro, siempre por la boca, muy despacio. Y ya debe estar todo resuelto. Ahuyentados convenientemente los fantasmas. Dispuesto para afrontar un nuevo reto. Casi como nuevo. Casi como posible. Así lo dicen los manuales al uso y yo me leo todos los prospectos, como está mandado, incluso el de la aspirina cada vez que tomo una de uvas a peras. Me hubiera gustado ser embarazada. Que cantidad de fármacos me hubiera ahorrado. Pero, lo confieso, nunca he estado embarazado y como la química me da miedo, pues eso, que dejo que la física lo resuelva todo a pesar de su impotencia comprobada de siempre. Pero a lo mío. Como a pesar de todo los fantasmas amigos siguen en mi entorno sin sentirse ahuyentados y se deben encontrar suficientemente protegidos, porque incluso suelen emplazar en su entorno a otros desconocidos y ajenos, me dejo mecer por los finales de palabras arrastrados y nasales hasta convertirse en un no sé qué gangoso que imagino perfecto para una tarde de invierno tras los cristales empañados y con la proximidad de una chimenea debidamente encendida, y, tras este alarde de imaginación con la que está cayendo en este “seguro de sol”, me recojo, como me hubiera recogido de haber podido hacerlo sin recato, en posición fetal para volver al seno materno y aprovechar allí el tiempo perdido en una meditación sin fin.

¿Cómo he podido perder tanto tiempo? me pregunto. ¿Cómo uno, que se considera inteligente, puede ser tan inconsciente, tan dependiente, tan influible, tan irracional? ¿Cómo es posible que el ser humano, que ha pasado por tantas visicitudes, siga siendo tan endeble cuando el resto de animales, menos racionales, han evolucionado lo necesario, no para sobrevivir, que es lo mínimo, sino para ser necesarios y especies, cuanto menos, protegíbles ? Es terrible no saber contestar a una pregunta tan simple. Pero el problema no es no saber contestar. Lo de verdad terrible es saber que no hay contestación valida. ¿Qué somos los qué somos? - y esto, mal que nos pese a algunos descerebrados, no da más de sí más allá de la propia pregunta.
Si, lo reconozco. Me declaro un descerebrado irremisible. La culpa es mía por no haber evolucionado como dios manda, por haberme quedado en lo retórico, en lo absurdo, en lo racional sin solución y hasta sin justificación. Los demás, lo reconozco también, si han debido evolucionar. Los demás son felices, no se preguntan casi nada, nada les resulta chocante o asonante. Todo debe ser un problema de oído y no de entendederas. Si a los demás, que son muchos, no hay nada que les chirríe, será que el que está fuera de juego soy yo. ¿Y si lo estoy?,- sintiéndolo por mi mismo- , pues eso, ¡viva la diferencia!
Me encanta ser inconsistente, imprevisible, intranscendente. Hubiera querido ser trascendente, ya lo dije en otras ocasiones, pero me doy cuenta de lo que soy y con toda la rabia del mundo lo asumo. No me encanta, aunque lo proclame a los cuatro vientos; realmente sé que soy lo que soy, un flan, pero no uno cualquiera, soy, quiero imaginarlo, un autentico “flan chino el mandarín”, que debe ser de la misma época que mi amada y hasta hoy casi ignorada Amália. Me encanta, como el flan autentico, ser inestable, oscilante, sensible, saudade pura, pero genuinamente de huevo. Esperanza, Añoranza. Inestabilidad, Relatividad, Humanidad. Lo dicho, de huevo; y confío que sólo el chino supiera si lo era de gallina de granja, y su secreto se haya ido con él a la tumba.
Hay tal cantidad de puntos suspensivos en mi vida que, si hablaran, serían capaces de decir en su inexpresividad lo que jamás sería capaz de expresar yo a pesar de sentirlos a flor de piel, y por ello ahí lo dejo. Que cada cual rellene a su imagen y semejanza los espacios vacíos de su propia vida con sensaciones llenas o con las que sean. La verdad es que no sé para qué hay que llenar nada. Uno siempre es lo que es, por poco que llegue a ser, sino se deja llevar por los acontecimientos y por los demás, que es el peligro verdadero. Yo que soy un pobre imbécil, reconozco que casi siempre soy más cuando no sé como decirlo que cuando trato de llenar de palabras los espacios de mi propia indefinición, espacios vacíos, por supuesto, pero también calidos por la esperanza de lo que pudieran albergar en algún momento. En fin, que qué más da. Hoy sólo quería homenajear a Amália Rodrigues a la que no conozco y ni siquiera sé si vive, y nada más. Seguir escuchándola en esta tarde radiante de sol que invita poco al fado, pero que abre todas las puertas a la fantasía, a la que me encamino conscientemente a pesar de mi mismo, casi todo racionalidad y sentido practico. ¿ Pero, qué le vamos a hacer?

13 Comments:

Blogger Patricia Angulo said...

"Yo que soy un pobre imbécil, reconozco que casi siempre soy más cuando no sé como decirlo que cuando trato de llenar de palabras los espacios de mi propia indefinición"


Rescato esta frase, por no pegar aquí el post completo, con fado, con sol y con la imaginación a pleno, pero es que me he sentido que era yo quien lo pensaba, nada mas que mejor, mas claro, mas nítido.

Sencillamente, firmo al pie y te dejo un abrazo.

12:25 p. m.  
Blogger nomolamos said...

Lo importante es darse cuenta de lo que se quiere y de lo que no, y entonces hacer por conseguir lo que se desea y los puntos suspensivos que vas dejando en tu vida, no merece la pena rellenarlos porque ya pasaron su tiempo, lo interesante es no seguir dejandolos en el camino que te queda por recorrer...
Siempre adelante, como el "guerrillero" aunque dejemos la piel en el camino,
un besazo niño,

2:08 a. m.  
Blogger mangeles said...

Uinss que bien...post nuevo...aunque llego un poco tarde.

Pues veamos...a mi los propectos esos...y las instrucciones de todos los apararatos, me aburren más que el Quijote...¡¡¡ YO si que soy una descerebrada!!!

Con decirle que todavía...no he leído (ni por supuesto visto el DVD) sobre las instrucciones de mi nueva (se puede llamar nueva después de 3 meses...no sé)CAMARA DIGITAL DE FOTOS...


Y de práctica, y responsable...ufff...cada día tengo menos...¡¡¡ hago cada estupidez que...!!!

En fin...que además...preguntas, lo que son muchas preguntas...tampoco me hago...total..para no saber que contestarme.

Pero que como siempre...me encanta su post. Y me encantan sus pensamientos y consideraciones...y me encanta sobre todo QUE ESTÉ POR AHIII...

UN BESO

10:50 a. m.  
Blogger mangeles said...

VACIOS...PUNTOS SUSPENSIVOS...le cuento...

Mi familia paterna...Asturias

Prima hermana de mi padre...(EL 75...ELLA...COMO 60) viene hoy a mi despacho...riña de vecinos... accidente de tráfico...seguridad social...muchas consultas...MARI COMEMOS JUNTAS...CLAROOO PRIMAAAA...

(Juer y que le cuento yo a esta mujer....)

-OYE NO TE APETECE VER A MI PADRE
- MUCHÍSIMO..PERO NO QUIERO INCORDIARTE MARI
- NOOO NO ME INCORDIAS..VAMOS A CASA.
- ¿Y COMO ESTA MI PRIMO, VAMOS TÚ PADRE?
-CADA DÍA MAS SORDO
-YO TAMBIEN...Y NO ME HE TRAIDO EL SONOTONE.

(Me cago en la lexe....los dos sordos como tapias...y yo de interprete a GRITO PELAOOOO)

- TU PADRE Y TUS TIOS SE CRIARON EN EL PUEBLO..EN ASTURIAS

- NOOO ...YO SI...Y EL OTRO..PERO LA CHICA NO...ELLA EN MADRID.

-SE LLEVABAN MUY POCO TIEMPO...ERAN CASI IGUALES...

- QUE NOOO JODER...QUE YO SOY EL MAYOR...Y LE LLEVO 4 AÑOS A LA CHICA (q.e.p.d.) Y AL CHICO...AL PEQUEÑO LE LLEVO CASI 7.

(Me quiero morir...quiero tirarme al tren...quien me manda a mí...seré gili...)

-MARI... TÚ ABUELA SE MURIO A LOS 21 AÑOS...

- PERO QUE NOOOO...QUE MI MADRE NOS TUVO A LOS TRES....

- PERO MUY JOVEN...

- PERO JODER...QUE NOOO...QUE ENTRE EL PRIMERO Y EL ÚLTIMO HAY 10 AÑOS...COMO HUEVOS..SE VA A MORIR CON 21...


( ¡¡¡seré gilipollas...si es que toda mi vida he sido una gilipollas...¡¡¡¡)

12:45 p. m.  
Blogger Ginebra said...

¡Anda! A mí también me gustaría ser trascendente y no como soy, que tengo la misma profundidad que un charco, pero efectivamente cada uno somos como somos.

Es bueno que haya vuelto.

PD.- Amália Rodrigues es una de mis cantantes preferidas (por ahí tengo una carpeta de vinilos que se llaman "Todo Amália", y muchos CDs) y murió hace unos años.

5:15 a. m.  
Blogger mangeles said...

Bueno...ahora que estoy de finde...me voy a buscar esos fados...a ver como suenan...


Besos...feliz finde.

6:50 a. m.  
Blogger mangeles said...

Por cierto...yo le declaro a Vd. especie protegida...cada vez hay menos filósofos.

Besos de entresemana

6:09 a. m.  
Blogger Antón Abad said...

¡Uy amigo ARGAMENÓN!, doña AMÁLIA cambió el micro por el harpa hace mucho, pero alunos dicen que, como Gardel, cada día canta mejor.
Haga como Don Fernando, que no se preocupaba por lo que era, pues terminaría siendo otro.

11:25 a. m.  
Blogger mangeles said...

Que pase una buena primera semana de Otoño ...

Besos

Por cierto ¿Quien es D. FErnando?.

10:25 p. m.  
Blogger argamenon said...

Pues se lo agradezco, Doña Mangeles. Tratare de sobrevivir a inundaciones, trombas y granizos, y, si es posible, de sobreponerme a que mis días sean cada vez más cortos.
¿Don Fernando? Sólo sé que hay un D. Fernando que arrastra tras de si su propia esquina, como yo lo intento con mis preguntas.
Por cierto, el que me ha desconcertado es el Abad. Todavía no he tenido oportunidad de leerle demasiado, pero hay algo en él que me resulta más que familiar. ¿Qué le parece a usted?

7:35 a. m.  
Blogger mangeles said...

Mi querido ARgamenón, yo le he preguntado un montón de veces al Santo Anacoreta si tiene algo que ver con Sean Connery...por su parecido físico...o con Escocia...pero absorto en sus pensamientos...directamente...me ignora.

Que le vamos a hacer...

BEsos pasados por agua..

11:59 a. m.  
Blogger Ginebra said...

Fado por fado.

1:35 a. m.  
Blogger Umma1 said...

Puesta a elegir, dado que soy afecta a las divagaciones, prefiero la sensación punsante que me baja a la realidad contante y sonante.

A la finitud consciente, que me lleva a imaginar trascendencias que reparen lo inevitable.

El fado tiene ciertas virtudes, al que le gusta pensar lo envuelve y lo lleva muy hondo; al nostálgico le hace cruzar el puente a la melancolía; al enamorado le provoca sonetos.

Es una música encantadora y extremadamente peligrosa.

3:51 a. m.  

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